Esa fue la actitud de Noemí Alvarado, acusada de por el abuso sexual de dos mujeres cuando ellas eran niñas, en las décadas de 1970 y 1980, en la primera jornada del juicio del caso más antiguo denunciado.
La condena recayó sobre Néstor Leonardo Salto, condenado por el juez Leandro Lazzarini por hechos cometidos en las localidades de Santo Tomé y Sauce Viejo durante alrededor de un año.
En uno de los operativos, según dijeron fuentes del Misterio Público Fiscal (MPF), se pudo determinar que uno de los detenidos abusaba sexualmente de su hija de 3 años y que lo filmaba.
El caso se inició el viernes pasado cuando el pequeño fue llevado por la madre y su pareja a la sala de primeros auxilios del barrio Agustoni, de Pilar, y tras el deceso se descubren las vejaciones.
El ex sacerdote Carlos Eduardo José, de 62 años, fue absuelto con un fallo dividido en el juicio que se le seguía por abuso sexual infantil agravado y se dispuso su inmediata libertad.
La condena “contempla la situación de extrema vulnerabilidad en la que colocó a la víctima, quien debió ser institucionalizada por los abusos que sufrió”.
El hombre de 50 años, cuya identidad no fue proporcionada para resguardar a la víctima, fue detenido en la zona oeste platense. Camino a la comisaría quiso simular que entraba en trance y hablaba diversas lenguas, detallaron las fuentes.
La UFI 3 realizó la pericia según protocolo de abuso sexual y será indagado este lunes.
Un hombre de 37 años que había sido condenado a una pena de dos años de prisión en suspenso por distribución de material de abuso infantil a mediados de 2019 fue ahora procesado con prisión preventiva acusado de reincidir en este delito.
Quinto Poder