Miradas. A Dos Años del 7 de Octubre: Nosotros enseñamos vida.

*Por Fátima Elía (Instituto de Investigación y Análisis Geopolítico Alexandre Pétion)

«Nosotros enseñamos vida señor. Nosotros los palestinos nos levantamos cada mañana para enseñarle al resto del Mundo, vida, señor…»

 Rafeef Ziadah, palestina-canadiense, Movimiento Boycott, Desinversión y Sanciones BDS

Hoy nos convoca una Causa que no es ajena, aunque suceda a miles de kilómetros: La Causa del Pueblo Palestino, que resiste desde hace más de 77 años el despojo, la ocupación, el apartheid, y hoy, el genocidio en Gaza, que desde al menos dos años no hay palabras creadas por la Humanidad, y menos desde el Derecho Internacional, para describir tanto dolor y deshumanización. Hablar de Palestina desde Argentina no puede ser un gesto solidario vacío. Es reconocernos como parte de una historia compartida de pueblos que han sido colonizados, negados, silenciados. Desde nuestra memoria argentina y Latinoamericana por lo que fueron el Genocidio a los Pueblos Nativos de América o el Abya Yala, desde la explotación, la esclavitud, la desigualdad o de lo que fue la Doctrina de Seguridad Nacional o la violencia sistemática del Terrorismo de Estado, sabemos que no hay Paz sin Justicia, ni Justicia sin Verdad. Y el Nunca Más es una bandera que debe atravesar las barreras geográfícas, para también conectar todos los corazones Humanos. Sino no tiene sentido seguir escribiendo miles de páginas de historia, ni tomos de leyes escritas, ni publicar investigaciones académicas, ni levantar falsas banderas de la búsqueda por la Justicia Social y por el Bien Común, cuando mueren decenas de personas por día y seguimos tapando el Sol con la mano. Hasta la Tierra grita y nadie la escucha.

Al día de hoy, desde el 7 de Octubre del 2023, tenemos solamente en Gaza, Palestina Ocupada, más de 60 mil muertos, de ellos 20 mil niños y se calcula por varias fuentes que más de 300 mil desaparecidos. Existen cientos de familias que desaparecieron, sus apellidos enteros. Miles de niños completamente huérfanos. Cientos de periodistas y médicos asesinados. Hambre sistemática como herramienta de dominación, bombardeos continuos, ataques de francotiradores constantes y bloqueo hacia la ayuda humanitaria.

Lo que hoy ocurre en Palestina no es un “conflicto”. Aquí no hay ningún tipo de simetría de poder. Tampoco es un problema religioso. Es la continuación de la Nakba: La Catástrofe Palestina, que desde 1948 es la violación y ocupación sistemática terrorista que el sionismo del Estado de Israel comete contra el Pueblo Palestino. La búsqueda de su destrucción física, simbólica y cultural desde la negación por su derecho a existir. Es el más claro ejemplo de colonialismo y dominación occidental y de la explotación salvaje capitalista.

En este contexto, desde Argentina, el Comité Argentino de Solidaridad con el Pueblo Palestino, junto a las organizaciones que lo integran, que todos los días aumentan en número, intentan difundir la Causa y generar iniciativas para visibilizar la lucha del Pueblo Palestino y mostrar nuestro apoyo, denuncia y empatía. El objetivo no pretende ser neutral: Es una toma de posición desde la Memoria, la Historia, la Resistencia, la Dignidad y los DDHH.

Los seres humanos están despertando consciencia y se unen más voces cada día  desde todos los confines de la Tierra, en un solo grito: ¡Palestina Vencerá y será Libre! Las nuevas generaciones que no vivieron ni la Segunda Guerra Mundial ni los diferentes genocidios de la historia, sí entienden la deshumanización de la vida palestina, y miran los símbolos de resistencia cultural como la sandía, la kuffiyeh, la llave del Retorno y la bandera verde, blanca, roja y negra como la esperanza de una vida digna y justa para ellos y ese nuevo Gran Nosotros. Los jóvenes que han sido menospreciados y muchas veces prejuzgados comprenden la crueldad absoluta de la cotidianeidad de los Palestinos, que luchan frente al abuso y la pérdida del control   de sus vidas frente al Ente Sionista Israelí de parte de las Fuerzas de Ocupación, los colonos y todas las instituciones Israelíes. La llamada Generación Z junto a la resistencia de todas las otras generaciones militantes, son las que encabezan campañas como el Movimiento BDS, Boycott Desinversión y Sanciones, una campaña internacional que surgió desde Palestina para el Mundo y boicotea económica y culturalmente todo el aparato financiero colonialista que sostiene e invierte en el Ente Israelí y que también lo legitima desde sus estrategias de propaganda. Así mismo, son las juventudes comprometidas desde todos los sectores políticos, sociales y artísticos, las que fueron masificando y expandiendo a la “Flotilla de la Libertad a Gaza”, que comenzó en 2010 y donde hasta asesinaron participantes, y se convirtió en la gran Flotilla Global Sumud con casi 50 barcos y 500 activistas de 44 países desde organizaciones de la sociedad civil. El objetivo de todas era llegar a Gaza, rompiendo el cerco y bloqueo israelí para abrir un corredor y entregar Ayuda Humanitaria y facilitar alimentos y medicamentos. Actualmente esa última flotilla también fue secuestrada en Aguas Internacionales, encarcelada y deportada, y hay más de 100 activistas en una prisión de máxima seguridad donde han recibido todo tipo de humillaciones, torturas y violaciones que están siendo documentadas. Los Estados deben denunciar y mover sus aparatos institucionales nacionales e internacionales también para liberar a todas estas personas que fueron tratados como supuestos “terroristas” y están incomunicados todavía. Entre ellos Celeste Fierro, diputada del Frente de Izquierda Unidad, Ezequiel Peressini y Carlos “Cascote” Bertola, que fue capitán de una embarcación que salió de Barcelona con bandera española y fue interceptada en aguas internacionales tratando de llegar a Gaza.

Es importante pensar en la identidad Palestina como un todo integral. Es el Pueblo o Nación de toda la Palestina que tiene orígenes y lazos sanguíneos de 6000 años, en la llamada región de Canaán, y que comprende la llamada Palestina Histórica: La Franja de Gaza, Cisjordania, Jerusalén, todas las ciudades y los campos de todos los territorios ocupados por lo menos desde 1948, donde se destruyeron más de 500 aldeas y hubo más de 900.000 desplazados refugiados, y que luego desde 1967 se profundizó. Existe una Diáspora Palestina de ocho millones de personas, muchos en condiciones de refugiados en todo el Mundo que ansían el Retorno a sus hogares ancestrales.  Ese Pueblo sufre, lucha y resiste frente a un agresor que ocupa, destruye, borra, apropia y destierra sin tapar ya nada y con total impunidad, soberbia y control ideológico sobre casi toda su población ocupante que también es adoctrinada, utilizada y secuestrada.

Como dijo Fidel Castro: Jamás la causa palestina pareció más justa que en contraste con la brutalidad repulsiva de sus adversarios. La humanidad no olvidará ni el heroísmo de los agredidos ni la barbarie de los agresores.

Palestina no es sólo un territorio entre el Mar Mediterráneo y el río Jordán: es la Causa de la Humanidad. Todos los ojos se abren como testigos de los acontecimientos cuando logramos surfear las olas de los algoritmos y bloqueos de la información, de las barreras de la tecnología y lo digital. Nunca fue tan claro quiénes son las víctimas y quiénes los victimarios. Quiénes son los desposeídos y quiénes son el Poder Real. La complicidad de los medios hegemónicos aún sigue siendo masiva, a pesar de algunas datas valientes que se escapan frente a un sistema que es condicionado por las grandes corporaciones y que utilizan todas innovaciones, recursos y la inteligencia artificial para filtrar y colocar propaganda con el objetivo de seguir cooptando las mentes solitarias. Pero el despertar es inminente, el famoso boca a boca se replica y todos somos difusores, influencers o embajadores de la Causa Palestina. Nadie esta ajeno más al tiempo, ¡ya no hay más excusas! ¡El sentimiento de pertenencia a una Causa Común a todas las Luchas todavía está en construcción, pero aumenta día a día la esperanza de un Mundo más justo o en proceso a construirse un nuevo horizonte de posibilidades donde los Pueblos sean los protagonistas de la historia y artífices de su tiempo!

Seremos millones de flotillas de barcos en el mar y océanos de la resiliencia y de la perseverancia: ¡Del Sumud en lengua árabe! Un sentimiento que no se puede explicar con palabras, que atraviesa todos los sentidos, que une todos los corazones y que enciende la chispa de la liberación sobre ese apagón genocida donde lo único que se escucha de fondo son las balas, las explosiones, los llantos y los gritos. Millones de personas que hace décadas fueron negados, discriminados y buscan ser exterminados. Con la fuerza de su Fe, y ayuda de sus comunidades continúan amando su Tierra y su Patria, a pesar de haber perdido todo lo material, los servicios y cualquier atadura al mundo capitalista. Lo único que atesoran es poder alimentarse, abrigarse y comunicarse. El celular les sirve como ancla al Mundo que por un lado los odia o finge demencias y que por el otro los reconoce y empatiza a la distancia con una pasión que mueve montañas y mares. ¡A pesar de los muros, las cadenas, las humillaciones, el odio y el resentimiento, los palestinos hoy más que nunca saben que el Mundo los conoce y la ayuda está en camino! 

Sobre esta Tierra hay cosas que merecen la Vida…Se llamaba Palestina, se llama Palestina y se seguirá llamando Palestina! Dice el poeta de la resistencia palestina Mahmud Darwish (1941-2008)… ¡Porque cuando hay Amor por la Vida, Amor por la Patria y a una Comunidad Humana, los puentes, los caminos, los árboles, las olas, los hilos, las llaves y todas las manos se unen en un sólo ideal! ¡La Liberación!

Y desde Argentina también mientras haya ocupación, despojo, muerte y silencio, seguiremos hablando, denunciando y resistiendo. No permitamos que el sionismo nos imponga miedo, nos criminalice, nos presione o nos lleve al olvido. No al silencio cómplice. ¡No dejemos de hablar de Palestina! ¡Viva Palestina Libre desde el Río hasta el Mar! ¡Paz, Dignidad, Justicia y Autodeterminación para todos los Pueblos Oprimidos del Mundo! ¡Libertad para los activistas secuestrados de la Flotilla Global Sumud por el Ente Sionista Israelí, entre ellos Celeste Fierro, Ezequiel Peressini y Carlos “Cascote” Bertola!

 ¡Hasta la Victoria siempre! Venceremos!