El Transporte Público del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) debió adecuarse con medidas excepcionales para enfrentar la pandemia, en tanto que redujo su uso un promedio del 70% durante los seis meses de aislamiento, en relación a los que lo utilizaban en los días previos a la pandemia, según datos suministrados por el Ministerio de Transporte.
El promedio de usuarios en la última semana del ASPO fue de 1.270.000, mientras que, en los días previos al 20 de marzo, cuando se decretó la primera cuarentena, el promedio era de 4.242.500 personas transportadas.
La movilidad de la Ciudad durante la pandemia del coronavirus exhibió una «situación histórica» en la cual el impacto más notorio se vio en el servicio de transporte del subte, donde se registró una marca que reflejó un mínimo de pasajeros trasladados equivalente al 2% de los usuarios habituales en una jornada antes de la cuarentena.
En lo que hace al movimiento interjurisdiccional, en lo que va de septiembre el 61% se registró dentro del Gran Buenos Aires, el 20% dentro de la Ciudad, el 15% desde la Provincia hacia la Ciudad y el 4% desde CABA hacia Provincia, en tanto que los números fueron similares en agosto, julio y junio, con mínimas variaciones.
«con la pandemia, en la cual el transporte público solo puede ser utilizado por los trabajadores esenciales, se observó «una tendencia hacia la movilidad individual de las personas».
Las autoridades informaron que se aplicaron nuevos protocolos para todas las modalidades de transporte, y al respecto fuentes del Ministerio indicaron que se modernizó e innovó para intensificar las tareas de desinfección de unidades de trenes y colectivos, se incorporaron cámaras térmicas y controles sanitarios en las principales estaciones de tren y se puso en marcha el sistema Reservá tu Tren para garantizar el distanciamiento social en las 5 líneas ferroviarias del AMBA.
También se reforzó el sistema de micros como complemento de los trenes, y se adaptaron las unidades de colectivos para cumplir con las recomendaciones sanitarias, mientras que, complementariamente, se mantuvo una elevada oferta de buses, teniendo en cuenta que en un día normal previo al Aislamiento Social Preventivo Obligatorio (ASPO), circulaban 3,4 millones de usuarios en 14 mil unidades de colectivos.
En cuanto a los ferrocarriles, se generó el sistema de reserva online para evitar aglomeraciones en hora pico, se colocaron cámaras térmicas y controles sanitarios, se realizaron testeos en estaciones y se organizaron refuerzos de micros para evitar aglomeración en las formaciones.
«esta elección de la bicicleta se va a sostener más allá de la pandemia, vino para quedarse», aseguró el director de cimbra, Daniel tigani.
Del mismo modo, se avanzó en la innovación en desinfección de unidades y estaciones, se realizan testeos a trabajadores de Trenes Operaciones y se realizan controles de temperatura y oximetría en 22 puestos sanitarios ubicados en lugares de toma de servicios las 24 horas.
En lo que hace a los subtes, en lo que va de septiembre, la red fue utilizada diariamente por unas 75 mil personas, el 7% de la cantidad de usuarios que viajaba antes de que se declarase el aislamiento, cuando por las 6 líneas y el premetro viajaban 1.112.000 pasajeros por día.
En agosto, la cifra total fue de 1.547.217 usuarios en el mes, un 5% de los que usaban el servicio antes del 20 de marzo, mientras que la utilización en el mes de abril, fue de poco menos del 3%.
Las fuentes aclararon que sigue vigente la suspensión de hasta por 7 días para las tarjetas SUBE que hayan registrado viajes durante más de 2 días consecutivos en transporte de pasajeros urbanos de forma interjurisdiccional sin estar vinculadas a un Certificado Único Habilitante para la Circulación.
En cuanto a la utilización de la tarjeta SUBE, al haber cerrado su atención al público desde el comienzo de la pandemia, se habilitaron las gestiones 100% online, tanto en lo que hace a la carga de tarjeta como a la adhesión a la tarifa social y la averiguación de número de tarjeta no legible, por ejemplo.
Respecto al servicio de micros para repatriados, se dispusieron unas 620 unidades para más de 20.000 ciudadanos que regresaron a sus hogares por estos medios y se efectuó un mantenimiento de terminales de ómnibus y terminales ferroautomotoras.
Los servicios de larga distancia regulares fueron suspendidos desde el comienzo de la pandemia para evitar la propagación y circulación del virus entre jurisdicciones. Fuentes del Ministerio de Transporte informaron que está previsto que las medidas adoptadas mantengan su vigencia durante los próximos meses, en tanto se mantenga el aislamiento social preventivo obligatorio.
El secretario de Transporte y Obra Pública porteño, Juan José Méndez, afirmó que con la pandemia, en la cual el transporte público solo puede ser utilizado por los trabajadores esenciales, se observó «una tendencia hacia la movilidad individual de las personas», por eso manifestó que «quisimos acompañar desde el Estado el uso de la bicicleta, por eso avanzamos en dos ciclovías en las avenidas Corrientes y Córdoba».
Al respecto, el director ejecutivo de la Cámara Industrial de la Motocicleta, Bicicleta, Rodados y Afines (Cimbra), Daniel Tigani, precisó que con la pandemia «la industria de la bicicleta pasó a ser un boom» y estimó que para fin de año se venderán aproximadamente 1,6 millones de unidades.
«Veníamos de años malos de venta, pero desde mediados de junio tenemos una demanda tremenda, así que nos pusimos a trabajar con el esfuerzo máximo posible porque creo que esta elección de la bicicleta se va a sostener más allá de la pandemia, vino para quedarse», evaluó.


0 comments on “El uso de transporte público se redujo un 70% en los últimos 6 meses y creció el uso de bicis”